ITALIA (ROMA)
Los romanos
son los elegidos en este cuarto puesto de la historia de la ingeniería, el
imperio romano a nivel de conocimiento e ingeniería fueron quizás los mejores y
los más adaptables a todo tipo de circunstancias, debido a la cantidad de
conocimiento que obtuvieron de los distintos pueblos que estos conquistaron.
Esta civilización fue bastante optimista con lo que confiere a obras de
ingeniería civil, pues mientras los griegos se dedicaban a la filosofía e
erguir monumentos a sus Dioses, los romanos hicieron obras que hasta la fecha
son inquietantes y han dejado su huella, y su aporte al mundo de la ingeniería.
Como una
nación bastante extensa, fueron muchas las obras de ingeniería que dejaron
plasmadas y algunas aún perduran hasta nuestros tiempos. Los romanos
construyeron ciudades que tienen un alto nivel de perfección, las fortalezas
militares, los muros, puertas, calles… entre otros; son claro ejemplo de lo que
podían hacer con su ingenio, claro está que también hacían uso de la mano de obra
esclava extraída de Egipto o Etruscos.
LA INGENIERÍA ROMANA
Los romanos
para sus obras utilizaron piedras como el mármol, el uso de bloques de arcilla,
y a su vez estos utilizaban una mezcla compuesta de arena, cal y agua que
permitía unir fuertemente los bloques. Uno de sus más grandes descubrimientos
fue el cemento romano el cual sustraían del monte Vesubio en Nápoles y el mismo
era una mezcla de piedras pequeñas o arena, y pozzolana, todo esto lo
consiguieron en materia de ingeniería civil.
Todo núcleo
urbano que los romanos edificaban, debía de constar de una serie de requisitos
tales como: Una muralla de protección, la cual estaba enterrada varios metros
por debajo del nivel de superficie y que tenía una separación al medio para
poder movilizar los guardias que custodiaban la ciudad. Un arco o puerta de
entrada, el cual comúnmente estaba en una pequeña parte de la muralla, lo cual
daba acceso a la ciudad. Calles pavimentadas y entrecruzadas, esto los romanos
lo tomaban en serio y tenían todo un sistema complejo de como pavimentar sus
calles y hacer las aceras estilo mosaico, de modo que esto le daba un aspecto
más atractivo a la ciudad. A parte toda ciudad planeada por ellos, debería de
tener un recinto para adorar a sus deidades y un edificio o salón de mármol para
las reuniones gubernamentales, más algunos otros recintos como plazas y
bibliotecas, más un sistema bien elaborado de cañerías y alcantarillas, para el
libre tránsito hasta el mar de sus aguas residuales. Por estas mismas podría
tranquilamente transitar un hombre pues eran bastante grandes, pero al final de
cada una tenían una rejilla, lo cual bloqueaba el acceso subterráneo a la
ciudad.
Por otro lado
las ciudades romanas constaban de un sistema de tuberías y cañerías las cuales
servían a los baños públicos o los conocidos como termas, ya que estos sistemas
de tuberías llevaban aguas calientes y frías hasta dicho recintos. Estas
tuberías subterráneas eran construidas de plomo para una mejor duración.
TERMAS O BAÑOS PÚBLICOS EN EL IMPERIO ROMANO
Los ingenieros
del imperio romano sabían y conocían que una nación crece cuando tiene un
fuerte sistema de comunicación entre las principales ciudades que la conforman,
por lo cual construyeron lo que hasta hoy es uno de los sistemas más grandes
del mundo de comunicación vial, la carretera más popular de estas calzadas fue
la “Vía Apia”, cuyo trazado es de 580 km y servía para enlazar Roma con las
colonias del Adriático. Las calzadas de estas vías cumplían también unos
requisitos muy específicos como: el trazado debía de tener más de un metro de
profundidad puesto que la vía estaba compuesta por cuatro capas superpuestas;
la primera capa y la que quedaba a la vista era denominada con el nombre de
“Pa-vimentum”. Bajo ésta quedaban tres capas de infraestructura llamadas “nu-
cleus”, “rudus” y “estatu- men”. A cada 1481 metros, se colocaba un poste que
marcaba lo que se conocía como una “milla romana” (unidad de longitud de la
antigua roma), y esto a su vez indicaba la distancia más próxima que se
encontraba la próxima población romana.
CALZADA ROMANA EN CONSTRUCCIÓN
La creación de
acueductos para abastecer las ciudades de agua fue todo un reto, el agua fluía
a través de estos por efecto de gravedad (los romanos usaron esto a su
beneficio), ya que el agua provenía de embalses situados a una mayor altura;
los canales o acueductos eran de ladrillo o de piedra con un revestimiento interior
de cemento impermeable, y en promedio medían 90 cm. De ancho y 1.8 metros de
profundidad; algunos eran subterráneos y tenían respiraderos cada 73 m
aproximadamente.
ACUEDUCTO DEL GARD, EN NIMES
Aportes de los
romanos a la ingeniería moderna fueron: El grandioso y majestuoso coliseo
romano (lugar de entretenimiento), el anfiteatro de la ciudad de Arles en
Francia, El teatro de Orange, Puente y Acueducto del Gard en Nimes con 50 m de
altura y 300 de largo, ubicado en Francia. El primer acueducto de Roma el “Aqua
Appia”, medía unos 16 Km de largo y la mayor parte de su recorrido era
subterráneo.
COLISEO ROMANO
Ingenieros
notables del imperio romano fueron:
·
Marco Agripa, responsable de las
obras hidráulicas del imperio.
MARCO AGRI-PA, INGENIERO HIDRÁULICO.